Avanza la puesta en marcha de un sistema de alerta por desapariciones de alto riesgo, especialmente menores, para su difusión en los medios
Más del 92 por ciento de los cerca de 30.000 casos de personas desaparecidas que han sido denunciados en estos tres últimos años se han resuelto, según ha adelantado en el Senado el ministro de Interior, Jorge Fernández Díaz.
El ministro ha respondido así en respuesta a una interpelación formulada por el senador de la Entesa catalana, Rafel Bruguera, sobre personas desaparecidas, dado que según ha puntualizado, anualmente desaparecen más de 10.000 personas, de las que 100 nunca serán localizadas.
Así, desde la puesta en marcha en España el pasado 1 de enero de 2010 de la base de datos de personas desaparecidas y cadáveres sin identificar, hasta este pasado 11 de enero, los cuerpos policiales españoles recibieron un total de 29.607 denuncias por desaparición sin causa aparente, de las que se resolvieron 27.279, es decir, más del 92 por ciento de los casos denunciados.
En el caso concreto de los cuerpos dependientes de Interior, Fernández Díaz ha detallado que el Cuerpo Nacional de Policía resolvió 12.222 denuncias, de las 13.530 recibidas en ese periodo, lo que representa un índice de resolución superior al 91 por ciento; mientras que la Guardia Civil ha solventado 8.864, de las 9.499 recibidas, lo que significa una resolución del 93 por ciento.
UN SISTEMA DE ALERTA POR DESAPARICIÓN
Igualmente, ha avanzado la puesta en marcha de forma inmediata de un sistema de alerta por desaparición de alto riesgo, con el que se pretende dar más difusión en aquellos casos de menores desaparecidos, mediante la formalización de acuerdos con los medios de comunicación.
En este contexto, Fernández Díaz ha recordado el convenio alcanzado con la Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE) y con la Fundación ANAR de ayuda a Niños y a Adolescentes en riesgo, suscrito en mayo de 2012, y que, según ha puntualizado, sigue abierto a la incorporación de otras instituciones.
De la misma manera, se ha mostrado dispuesto a avanzar en la labor de coordinación con los servicios de salud autonómicos, mediante la incorporación de los datos de salud relativos a las personas hospitalizadas y sin identificar en la base de datos de las personas desaparecidas.
"Al proporcionar los datos y la fotografía en este procedimiento se van a ampliar las posibilidades de éxito en estos casos", ha valorado.
SE ESTÁ TRABAJANDO "MUCHO Y BIEN"
Con todo ello, ha celebrado los datos de resolución obtenidos en estos cerca de tres años ya que, a su juicio, ponen de manifiesto que se está trabajando "mucho y bien" en la búsqueda de personas desaparecidas.
Eso sí, el titular de Interior reconoce que cada persona no encontrada es un drama familiar a tratar. "En absoluto nos planteamos dormirnos en los laureles", ha sentenciado.
De esta forma, ha recordado la puesta en marcha desde el 15 de septiembre de 2010 del número de atención telefónica para casos de niños desaparecidos, el '116.000'. "Creo que podemos y debemos avanzar juntos y plena disposición para mejorar la situación que en estos momentos tenemos", ha agregado.
DESAPARICIONES SIN CAUSA APARENTE
Por su parte, el senador catalán ha hecho hincapié en los casos de desapariciones sin causa aparente, sin que medie la sospecha de ausencia voluntaria o violenta, ya que generalmente se trata de personas de edad avanzada o de personas con un enfermedad mental.
Por todo ello, Bruguera ha propuesto mejorar la prevención de estos casos mediante los recursos tecnológicos; además de una regulación jurídica del ausente, definiendo derechos como de protección a la familia, a la vida o a la información; así como la búsqueda del desaparecido, con la creación de bases de datos unificadas de desaparecidos, de cadáveres sin identificar o de ADN.
De la misma manera, ve conveniente el establecimiento de un protocolo de actuación "concreto y vinculante" que sea específico para estos casos y que contemple, por ejemplo, la asistencia a los familiares, informando y asesorando en el ámbito jurídico y el psicológico.
Fuente: Europapress